Una guía para disfrutar de los mercados y costumbres más auténticas del Ripollès.
Feria de Navidad de Ripoll
En diciembre, Ripoll da la bienvenida a la Navidad con una feria que llena su centro histórico de colores, sabores y tradición. Las paradas de artesanía y productos de temporada conviven con música en las calles y talleres pensados para disfrutar en familia. Además, la implicación de escuelas y entidades del municipio en actividades a beneficio de La Marató de 3Cat añade un ambiente cercano y solidario, que convierte esta feria en una experiencia muy auténtica.
Mercado de Navidad de Camprodon
En uno de los valles más bonitos del Pirineo, Camprodon celebra un mercado que parece sacado de una postal. Sus paradas ofrecen productos artesanales y de proximidad, mientras las calles, rodeadas de montañas nevadas, se llenan de visitantes. Un plan perfecto para pasear sin prisas, disfrutar del ambiente invernal y empaparse del encanto de este pueblo pirenaico.
Feria de Navidad en Sant Joan de les Abadesses
Sant Joan viste su casco antiguo con luces cálidas y una decoración que invita a pasear entre historia y tradición. Y entre todo este ambiente festivo, el gran atractivo del mercado es el Tió de Nadal, que desata la ilusión de los más pequeños mientras esperan su turno para hacerlo “cagar”. Cada golpe acaba en risas y regalos, convirtiendo la visita en un recuerdo inolvidable.
Tradición navideña en el Ripollès
Entre las costumbres más queridas destaca el encendido de luces en Ripoll, que cada 5 de diciembre marca de forma oficial el inicio de la Navidad en la comarca. Un pasacalle festivo, música local y una chocolatada popular convierten este momento en una celebración compartida entre vecinos y visitantes.
Un gesto sencillo pero profundamente simbólico que ilumina el invierno y da la bienvenida a unas semanas llenas de magia en plena montaña.